El cardón es una de las especies vegetales de La Palma y una de las más representativas del paisaje canario.
En La Palma crece libremente en las laderas rocosas, los barrancos y las zonas costeras bañadas por el sol.
Su silueta inconfundible, con brazos altos y verticales, da vida al terreno volcánico y tiñe de verde los acantilados que miran al mar.
Su aspecto recuerda a un cactus, aunque no lo es.
Pertenece a la familia de las euforbias y está perfectamente adaptado al clima cálido y a la escasez de agua.
Con sus brazos altos y verticales, puede alcanzar hasta tres metros de altura, formando grupos densos que parecen pequeños bosques.

Un símbolo del paisaje volcánico
El cardón es una planta endémica de Canarias, lo que significa que solo crece de forma natural en este archipiélago.
En La Palma se encuentra sobre todo en las zonas bajas y soleadas del este, sur y del oeste, desde Fuencaliente hasta Tazacorte, desde Santa Cruz hasta Puntallana, donde las condiciones son más áridas.
Sus tonos verdes contrastan con el negro de la roca volcánica, creando una imagen icónica del paisaje palmero.
En primavera, si observas de cerca, verás pequeñas flores amarillas que brotan entre sus brazos, un detalle discreto pero lleno de vida.
Curiosidades del cardón
- Su savia blanca y lechosa puede ser irritante, por eso se debe evitar el contacto directo.
- Puede vivir más de 200 años, resistiendo calor, viento y sequía.
- Las aves lo utilizan como refugio y punto de anidación, y muchas lagartijas encuentran entre sus brazos un hábitat perfecto.
- Era conocido por los antiguos canarios, que lo consideraban una planta sagrada asociada al sol y a la fuerza de la tierra.
Usos tradicionales del cardón
Antiguamente, el cardón tenía usos sorprendentes en la vida cotidiana de los palmeros.
Su látex, muy tóxico, se utilizaba para “embarbascar”, una técnica pesquera que consistía en arrojar trozos de cardón al mar para atontar a los peces y capturarlos fácilmente.
También se empleaba en veterinaria tradicional, como purgante para cabras, y en remedios caseros para aliviar dolores de muelas o tratar afecciones cutáneas.
Sin embargo, estos usos resultaban peligrosos y hoy están completamente en desuso.